lunes, 6 de diciembre de 2010

Cap 4- DMNAMM

Capitulo 4-
EDWARD POV
-Estás enamorado de ella- dijo Jasper con expresión seria.
-Jasper, creo que estas confundiendo el amor de padre con el otro- dije haciéndole entender de lo que estaba diciendo era una locura.
-¿A mi me estas diciendo que estoy equivocado?- se señalo con expresión irónica- ¿Yo, que soy el único que sabe la diferencias de esos sentimientos?
-¡Es que no tiene sentido!- le reproche sintiendo el pánico.
-Si lo tiene- discutió-. Tú ya no ves a Bella como la niña que era, la ves como una mujer…una que te gustaría poseer- si mi hermano se pudiera sonrojar ahora mismo estaría como del color de un pimiento.
-Estas equivocado, Jasper- baje la cabeza y trate de convencerme de que lo que decía no era cierto.
-De acuerdo- se giro para irse-. Cuando te choques con la pared no me cansare de decirte "te lo dije".
Luego de eso desapareció de mi vista dejándome solo y aturdido. Aun procesaba las palabras que Jasper me había dado y aun no le encontraba lógica. Por que ¿Cómo me iba a enamorar de Bella? Se supone que ella es mi niña y yo como un padre para ella.
Después de unos segundos de silencio tanto en mi cabeza como en el exterior, exploté. Comencé a reír histéricamente, tanto que me doble sobre mi estomago, agarrándome de un árbol…
-¿Qué es divertido?- pregunto la voz de Bella y deje de reír inmediatamente.
-Oh, Bella…-me quede mirándola, ella me miraba confundida y curiosa-. Bueno…veras, Jasper me contó un chiste…
-Ok, no quieres decírmelo, pero no me trates como si tuviera seis años- rodó los ojos y se cruzo de brazos mientras se apoyaba en un árbol- ¿Por qué te fuiste?
¡Genial!
-Tenía que cazar- mentí
-¿Y ya lo hiciste?
-Sip- me apresure a contestar.
-¿Sabes?, detesto que me mientas- se enderezó rápidamente y golpeo con un puño el árbol donde había estado apoyada, este se quejo y luego cayó al suelo-. Yo siempre te estoy contando que es lo que me angustia y te dejo consolarme, pero tú ni siquiera hablas conmigo con respecto a lo que te molesta…
-Bella…
-…Tampoco te pido que me cuentes tu vida entera, pero si lo que te agobia y te aleja de esa manera.
Estaba molesta, sus ojos se habían puesto negros, me mira seriamente y con reproche. Realmente le molestaba que yo me negara a contarle mis pensamientos, pero ¿Qué podía decirle? "Hey, Bella. Lo que pasa es que Jasper me acaba de tirar una bomba en la que dice que estoy enamorado de ti. Lo que por cierto es ridículo. Además de mis constantes pensamientos ilógicos. Pero no es nada de lo que te debas preocupar", sin duda eso sería lo mejor.
-¿Sin nada para decir?- pregunto arqueando una ceja y yo…simplemente la contemple-. Perfecto.
Giro sobre sus talones y camino por donde, supongo, había venido. Le dí la orden a mis pies de moverse, pero se habían clavado al suelo, dejándome ver como Bella se marchaba lentamente.
-¡Bella!- la llame pero ella ni siquiera se giro.
Y eso estaba bien, por que no sabía que decirle. No podía decirle la verdad, por que eso significaría que la alejaría de mí, además algo en mi interior temía a la reacción de ella…a su rechazo.
Con demasiado esfuerzo moví un pie, luego el otro y el otro, hasta que me encontré corriendo en su dirección. La tomé de la muñeca y la obligue a que me mirara. Ella forcejeó conmigo unos instantes, en ningún momento la solté, clave mis ojos en su rostro buscando su mirada, pero ella se rehusaba a mirarme, lo cual dolía.
Con mi mano libre intente tomar su mentón pero su mano libre me detuvo en mitad del camino, tome su muñeca y la aprisioné como la otra. Me miro frustrada y un gruñido escapo de sus labios.
-¿Por qué no confías en mí?- cuestiono- ¿Por qué tengo que ser yo la que sedo y no preocuparme por lo que te molesta?
-No quiero que me devuelvas lo que yo hago por ti.
-¡No te lo estoy devolviendo!- gruño mas fuerte-. Me preocupo por ti, me preocupa que sea lo que habita en tu cabeza lo que hace que te descuelgues de la realidad y te pierdas en tus pensamientos. Me preocupa el por que me mientes.
-¿Te preocupo?-pregunte sorprendido mientras mi cuerpo se llenaba de un extraño calor.
-¿Cómo no preocuparme?- pregunto como si fuera lo mas obvio del mundo.
Sin pensarlo la tome en mis brazos, la abrase con fuerza, hundiéndola en mi pecho…reprimiendo los deseos de besarla…
Mierda. Me había enamorado de ella.
.
BELLA POV
Sus brazos me rodearon con fuerza por los hombros y me apretaron en su amplio pecho. Aun estaba molesta, pero no pude contenerme a abrazarlo. Edward era un hombre muy bueno, desde que había vuelto a esta casa, él me había recibido con los brazos abiertos. No digo que los demás en la familia no lo hubieran echo, pero con él era diferente… todo con él es diferente.
En estas últimas semanas nos habíamos acercado mucho, prácticamente no podía estar lejos de él, quería saber que era lo que estaba haciendo, por que lo estaba haciendo y cuando iba a terminar de hacerlo para que su atención fuera mía.
Había estado mucho tiempo separada de él y todo el tiempo extrañándolo y ahora que lo tenía quería recuperar el tiempo perdido y estar aun más tiempo. Edward es todo en uno, mi padre, hermano y mejor amigo.
Cuando aquella tarde había ido a buscarme, intente hacer que se alejara de mi y que me dejara sola, pero cuando le vi, parado detrás de ese árbol, sumamente nervioso decidí que quería volver a estar con él como habíamos estado antes.
-Eres maravillosa, Bella- susurro en mi oído.
-Tú eres el que me esta sacando de este pozo- me separe un poco y le mire-. Tú eres el maravilloso.
Sus ojos…me veían diferente, eran intensos, calidos y hermosos. No pude contener levantar una mano a su rostro y apoyarla en su mejilla, él inclino su cara a ella y cerro los ojos, se veía tan en paz, como si hubiera descubierto algo.
-¿Me vas a decir que es lo que te desconecta del mundo?- pregunte una vez que recobre mi conciencia.
Abrió los ojos lentamente y su rostro se torno triste, con el miedo recorriéndome el cuerpo, tome su cara en mis manos y clave mis ojos a los suyos.
-¿Qué es lo que te preocupa para que pongas esa cara?- mi voz salió lastimera, ya que me dolía verlo así.
-Yo…er…- se paso una mano por el cabello-. La verdad es que no quiero decirlo por que no quiero ponerte mal a ti…
-Es sobre mi estancia en el castillo- afirme.
-Por todo lo que te paso- dijo y luego miro por sobre mi hombro.
Ahora fue mi turno en abrazarle, él preocupándose por mí y por mi bienestar, era imposible no querer a un hombre como él.
-Te quiero- hacía mucho tiempo que no se lo decía.
-Y yo a ti- beso mi frente y tomo mi mano para ir a la casa.
Caminamos de regreso a la casa como la vez en que él me saco del bosque, fuimos lento y tranquilos, total teníamos todo el tiempo del mundo…
-¿Por qué me seguiste?-pregunto de repente.
-Por que no sabía que te había pasado- contesté encogiéndome de hombros.
-¿Estas preparada para mañana?
-La verdad, no- y era verdad, aun no me sentía segura de estar cerca de un humano.
-Voy a estar contigo, no tienes que preocuparte- soltó mi mano y paso su brazo por mis hombros.
-La última vez que estuve en un ambiente con humanos, me los comí- otra verdad.
-Debes aprender a controlarte y hacerte inmune a su olor-
-Es fácil decirlo para alguien que tiene mas años que yo- le reproche.
-A todos nos paso, Bella- se detuvo y me giro para enfrentarlo-. Y a todos nos fue difícil, pero todos estaremos ahí por si algo sale mal…
-No quisiera exponerlos- baje la cabeza y él la levanto con uno de sus finos dedos.
-No lo aras, confío en ti- susurro mientras su rostro se acercaba al mío.
En un principio creí que daría un beso en la mejilla, pero a medida que se acercaba el rumbo era otro, y yo no tenía la fuerza para detenerlo, por que quería ver a donde llegaría…quería que me besara. Nuestros ojos estaban trabados, su mirada me decía mil cosas pero no la entendía. De repente como si una chispa de entendimiento cruzara por sus ojos, pego su frente a la mía y cerro sus ojos, soltando un pesado y largo suspiro.
-¿Estas bien?-pregunte un poco incómoda.
-Lo estaré- se separo y ahora si beso me mejilla-. Vamos, ahí cosas de las cuales debes aprender.
.
EDWARD POV
-Realmente no creo que sea buena idea-dijo Bella por quinta vez desde que había salido el sol.
-Deja de ser tan miedosa, Bella- le reprendió Alice.
-Pero… ¿Y si sale algo mal?- cuestiono afligida.
-No pasará nada, Bella. Quédate tranquila- le dije desde fuera de su puerta, Alice me había echado del cuarto por que tenía que vestirla, claro que no sin antes de que Bella le hiciera un escándalo por la ropa.
-Te lo dije- canturreo Jasper al pasar por mi lado, me gire y le fulmine con la mirada, el se encogió de hombros y rió-. Te lo dije.
-Ya. Basta. Jasper- gruñí pero él me ignoro y siguió canturreando.
-Sabes que con Jasper no debes apostar- me pincho Alice-. Es como yo.
-Si, insoportables cuando se lo proponen- murmure cruzándome de brazos, suspire y me apoye contra la pared.
-¿De que estas hablando?-pregunto la dulce voz de mi niña.
-De lo irritante que pueden ser Alice y Jasper- conteste y automáticamente me arrepentí.
-¿Por qué? ¿Qué hicieron?
-Lo que pasa, Bella- se entrometió Alice-. Es que a tu querido Edward le molesta que le digan la verdad en la cara.
Apreté los puños y resople ruidosamente, en la casa nadie más que ellos dos sabían de mis sentimientos, los demás no eran concientes de nada. Pero Carlisle y Esme estaban sospechando algo, según leía en sus mentes, yo seguía viendo a Bella de la misma manera, pero ahora era conciente de cómo la miraba. Pero ninguno me ha preguntado nada y yo no tengo deseos de contarlo a nadie.
Ayer cuando me di contra la pared, como dijo Jasper, estuve a punto de decirle mis sentimientos a Bella, sin mencionar que también la estuve a punto de besarla. Pero a último momento me desperté y apoye mi frente en la suya, no quería romper el contacto pero tampoco me quería apartar tan bruscamente como tenía en mente.
Aun no me hacía a la idea de que Bella me aceptara, por que busque en sus ojos algún indicio de sentimientos, pero ella me miraba como siempre, como su hermano, su padre y hasta como su mejor amigo.
-¿De que verdad habla Alice?- su dulce y suave voz me saco de mis pensamientos, me gire a verla y por poco abro la boca.
Estaba hermosa, más de lo que ya lo era. Llevaba unos jeans ajustados de color negro, junto con un polo de cuello alto azul. Ambas prendas se ajustaban perfectamente a su figura. Su cabello estaba suelto y caía libremente por el contorno de su rostro y sus hombros.
-Si pensaste que no habías abierto la boca, te equivocaste. ¿Eso brillante en tu boca es tu baba?
Alice no se había equivocado, estaba babeando.
-¿Qué tal me veo?-pregunto Bella, inocentemente.
-¿Por qué mejor no te damos una vuelta así te aprecia de todos los lados?- propuso Alice y antes de que Bella y yo pudiéramos decir algo.
Alice tomo la mano de Bella y la hizo girar sobre su propio eje, dándome una vista panorámica del… ¡Oh. Por. Dios! Creo que mi boca volvió a desencajarse y los ojos se me salieron de orbita.
-¿Y bien hermanito?- pregunto con sorna- ¿Qué tal se ve?
-Firme- respondí imaginando su…la carcajada de Alice soltó me hizo dar cuenta de lo que había dicho-. Quiero decir…- carraspeé-. Te ves hermosa.
-Gracias- miro al suelo y estrujo sus dedos.
-No me quiero imaginar como te pondrás cuando use un vestido- se burlo Alice en voz alta y salio saltando del pasillo.
-¿Lista?- pregunte en el incomodo silencio.
-Realmente, no- me miro por encima de sus largas pestañas.
-Ni aunque me mires así te libraras de no ir- sonreí y tome su mano.
-Pero es que realmente tengo miedo- sollozo con un adorable puchero.
-Nadie te va a morder, Bella
-No temo que me muerdan a mí, temo yo morderlos- ahora estaba irritada.
No pude evitar carcajearme por el comentario, había sido divertido. Bella me pego con el codo en las costillas y se rió conmigo. Mientras bajábamos las escaleras pensaba en como iría a reaccionar a los pretendientes de Bella. Por que era obvio que tendría a más de la mitad del colegio a sus pies.
-¿Iremos corriendo?-pregunte entusiasmada.
-Nos encantaría, pero debemos guardar las apariencias.
-Por eso odio relacionarme con humanos, lentos, en todos los sentidos, frágiles, en todos los sentidos y pervertidos- se quejo poniendo cara de asco.
-Tu fuiste humana- le recordé con una sonrisa.
-Pero no como ellos- se defendió.
-Claro que si- intervino Emmett.
-Emmett, no le molestes- le ordeno Rosalie, pero el idiota de la familia no le presto atención, lo cual era algo sorprendente.
-Eras lenta, en todos los sentidos, frágil, en muchos sentidos y pervertida- sonrió cuando Bella le estrecho los ojos- ¿No me digas que no recuerdas cuando oliste a Edward después de que vino de una cita con Tanya?
-Emmett- sisee cuando sentí la mano de Bella apretar la mía.
-Y puedo apostar todo lo que quieras a que lo sigues siendo- amplió su sonrisa hasta mostrar todos los dientes.
-¿Quieres ver que tan lenta soy?- le retó Bella y antes de que Emmett contestara, ambos había desaparecido de la casa.
-¿Por qué tú esposo debe ser tan idiota?- mire a Rosalie, esta se encogió de hombros y se puso la mochila al hombro.
-Que tengan un buen día- nos deseo Esme mirando por la ventana las manchas borrosas de sus hijos.
Se escucho un grito, de Emmett, un golpe y una barrida. Después de unos segundos Bella entro en la casa con una enorme sonrisa, se acerco a Esme y le dio un beso en la mejilla.
-Nos vemos más tarde, Esme- se acerco a Carlisle e hizo lo mismo-. Por cierto, te comprare flores nuevas.
En ese momento entro Emmett con toda la cara llena de barro, con algunos pétalos de flores, el cabello lleno de ambos incluyendo la remera blanca, que en el frente tenía una gran mancha de barro.
-No valía empujar- se quejo mirando a mi niña con ojos negros.
-Yo no te empuje, solo te puse la traba- se defendió Bella-. Que no sepas poner las manos antes que la cara no es culpa mía- sonrió de forma más angelical, pero a la vez demoníaca.
-Me las pagaras…-comenzó a amenazarla.
-Tu empezaste- intervino Alice-. Ahora ve a cambiarte o llegaremos tarde.
-Ustedes vayan primero- Rosalie suspiro y subió junto a su marido-. Nosotros iremos mas tarde.
Automáticamente la cara de Emmett cambio y sus pensamientos se volvieron sucios. Se giro para mirar a su esposa y ambos sonrieron de manera cómplice, segundos después desaparecieron de nuestra vista. Jasper salio corriendo fuera de la casa y Alice negó con la cabeza saliendo detrás de su compañero.
-¿No vendrán?- pregunto mi ángel con la mochila en su hombro.
-No y no te gustaría saber por que llegarán tarde- le saque la mochila y la coloque en mi hombro.
-¿Por qué…?-no pudo terminar ya que un fuerte estruendo y un jadeo se escucho en la parte superior de la casa-. Olvídalo, ya entendí.
De ser humana ahora estaría completamente roja, como cuando era pequeña. Sonreí y puse mi mano en su espalda baja, para empujarla levemente a la salida de la casa.
Por un momento me sentí Alice, ya que tuve el presentimiento que hoy sucedería algo…malo. Estaba relacionado con Bella.
Pero ella no haría nada malo.
Sería yo…

No hay comentarios:

Publicar un comentario